Una última semana salvaje y una crono de 40 km que puede reventar la carrera: el Giro 2026 presenta un recorrido diseñado para romper a los favoritos

El Giro más clásico y explosivo de los últimos años

El Giro de Italia 2026 ya tiene recorrido oficial y llega con un mensaje claro: aquí no se viene a sobrevivir, se viene a sufrir. La carrera combina etapas larguísimas, montaña concentrada en momentos clave y una contrarreloj de 40 kilómetros que puede dinamitar la general antes incluso de entrar en los Alpes.

La prueba se disputará del 8 al 31 de mayo y arrancará por primera vez desde Nessebar, en Bulgaria, a orillas del mar Negro, con tres primeras etapas relativamente tranquilas pero con kilometrajes que desgastan desde el inicio.

Primer aviso serio: Blockhaus de 246 km

El recorrido pega su primer puñetazo en la mesa en el séptimo día: Blockhaus tras 246 kilómetros.
Un diseño propio del ciclismo antiguo, creado para descolgar a quienes no lleguen con la gasolina justa. Difícil que aquí se decida el ganador… pero muy probable que alguno pierda el Giro.

La primera semana se cierra con otro final en alto en Corno alla Scale, más explosivo que decisivo, pero útil para seguir endureciendo la carrera.

La crono de 40 km que puede dejar media general sentenciada

El punto más llamativo del trazado llega al inicio de la segunda semana:
40 kilómetros totalmente llanos entre Viareggio y Massa, una invitación directa a los especialistas.
Un perfil perfecto para que alguien como Evenepoel —si se anima a venir— pueda abrir diferencias en minutos antes de la montaña.

Un Giro “a la antigua”: cronos largas, escaladores obligados a inventar y tensión hasta el último puerto.

Valle de Aosta: etapa corta, cinco puertos, caos asegurado

Tras la contrarreloj, el Giro vuelve a su identidad: montaña y ritmo inhumano.

El fin de semana en el Valle de Aosta ofrece una etapa de solo 133 km, pero con cinco puertos encadenados y final en Pila. Día perfecto para reventar el pelotón en mil pedazos.

Al día siguiente, Milán recupera protagonismo como llegada en una etapa llana que dará un respiro… antes del infierno final.

Tercera semana: corta, dura y sin un segundo de calma

La última semana empieza con una etapa de media montaña que finaliza en Carì, apenas 113 km, pero estructurada para que nadie pueda esconderse.

Y después llegan los dos días que decidirán el Giro:

Etapa 19: una orgía de Dolomitas

Passo Duran, Coi, Forcella Staulanza, Passo Giau, Falzarego y subida final a Piani di Pezè.
Una combinación brutal, propia de un “Queen Stage” histórico.
Aquí se pueden perder minutos… o ganar un Giro entero.

Etapa 20: doble subida a Piancavallo para el último golpe

El último cartucho llega en una etapa de 200 km y doble ascensión a Piancavallo. Diseño simple, final cruel.

Un Giro que tienta a Evenepoel y obliga a todos a salir de la zona de confort

El equilibrio entre montaña y contrarreloj es perfecto para los rodadores fuertes, pero la dureza se concentra en etapas muy concretas que pueden partir la carrera en mil pedazos.
Los diseñadores del Giro han dejado clara su apuesta: atraer a Evenepoel y obligar a los escaladores a atacar desde lejos.

El Giro femenino también sube el nivel

El 30 de mayo comienza el Giro de Italia femenino, con nueve etapas, contrarreloj, cronoescalada y un quinto día lleno de Dolomitas.
La etapa decisiva vuelve a ser la octava: Colle delle Finestre y final en Sestriere.

2 dic. 2025